¡Abuelitos felices!

Todos merecemos una oportunidad de seguir sonriendo, de jugar, de bailar y de ser felices.


No recuerdo exactamente si fue hace 4 o 5 años atrás que tuve la suerte de visitar un asilo de adultos mayores en San Juan de Miraflores junto con un grupo de amigos. Recuerdo tener que subir por una muy empinada pista, ya que en esa zona las veredas no estaban en muy buen estado. Llegamos y nos recibieron unas señoras muy amables que nos presentaron a los abuelitos del lugar.

Fuimos a mediados de diciembre y ya se sentía la Navidad en el aire. Los abuelitos tenían sus gorritos navideños y estaban muy contentos escuchando los villancicos. ¡Todo el local estaba decorado! Había un árbol de navidad, globos de colores rojo y verde, cintas de colores entre muchas cosas más que daban la sensación de un lugar muy acogedor para todos.


Había varias tareas qué realizar, y entre ellas estaba el participar en la elaboración del almuerzo para los abuelitos. Entramos a una pequeña cocina y, ¡a trabajar! Cortamos las cebollas, las zanahorias, las beterragas, abrimos las alverjitas y muchas cosas más para así poder apoyar a los señores que se encargaban de las ollas. También teníamos que lavar los cubiertos y ponerlos en servilletas para que se puedan repartir entre los presentes.

Otra de las tareas que nos dieron fue de preparar villancicos para poder cantar junto con los abuelitos. Contábamos con una guitarra, ¡y eso basto! Los abuelitos estaban muy contentos cantando con una alegría increíble.

¡Las risas eran inevitables! Ese día también fue un animador para jugar con los abuelitos, así que también contribuimos con él. Vestido de payaso, llevó unas máscaras para poder realizar ciertos juegos. Nosotros participamos y bailamos junto con los abuelitos. Disfrutamos de una mañana muy entretenida y le pudimos sacar algunas sonrisas a aquellas personitas que son olvidadas por la sociedad.

En Lima existen muchísimos asilos o casa hogar de ancianos para poder visitar, tan solo basta con escribirlo en Google para poder encontrar uno cerca de su ubicación. No es necesario el tener que llevar algo o pagar alguna cuota, tampoco el ponerte a cocinar o armar un show, ya que con su simple presencia y el poder sentarse a compartir con ellos unos minutos, se lo agradecerán muchísimo.

Este post tiene como finalidad el poder motivarlos a llevar alegría a aquellas personas que todavía tienen mucho por vivir y por dar. La edad avanzada de los abuelitos no es un obstáculo para poder seguir sonriendo, y ellos merecen ser felices. Tienen tan poco, pero son tan alegres que es increíbles poder compartir y aprender de ellos. Si bien tienen algunas dificultades por las enfermedades que llegan con el avanzar de los años, bailan y cantan junto con sus compañeros de una manera envidiable.

Fuente: Casa Hogar Splendor
Les dejaré un dato sobre un asilo de ancianos en el cuál están solicitando apoyo. Se llama “Casa Hogar Splendor” y queda en Los Olivos. Para ser voluntario solo tienes que mandar un correo a admin@splendorcasahogar.com para contactarte con ellos. También cuentan con una página en Facebook.

Tienen diferentes programas como Donaciones a la casahogar o el Programa adopta un abuelito, en el cual puede ayudarlo con su alimentación, escucharlo, visitarlo cuando gustes, o hasta leerle historias.




¡Únete con tus amigos, empieza una búsqueda y lleva sonrisas a esos abuelitos que tanto lo necesitan!



Comentarios

  1. Es tan necesario hacer sentir a estas personitas bellas que no están solos, se siente tan bien sacarles una sonrisa a estos bellos abuelitos, si tienes oportunidad de hacerlos sentir queridos, no pierdas la oportunidad, para ellos es muy importante además te transmiten una ternura que te hacen sentir bien .

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  2. La población de adultos mayores son de las más olvidadas en el Perú. Por ello, es bueno tener esta iniciativa de poder compartir un poco de tiempos con ellos, y así, traer un poco de alegría a sus vidas.

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